Por fin el jueves pasado fuí a realizar el estudio biomecánico llamado BG Fit. Por lo que había leído y visto en algunos vídeos sabía más o menos de qué se trataba y qué pasos se seguían. Y así fué, como ya comenté en una entrada antigua, en primer lugar me hicieron una especie de entrevista con preguntas que incluían desde mis antecedentes deportivos hasta mis aspiraciones futuras, pasando por el historial de lesiones y hábitos de entrenamiento. Después, me hicieron una especie de reconocimiento que incluía ejercicios de flexiblidad, observación de las articulaciones en posición estática y en movimiento, columna, pies, caderas... Una vez terminada la primera parte, pasamos ya a trabajar encima de la bici. Empecé a pedalear en el rodillo y el técnico iba observando la posición desde diversas perspectivas. De vez en cuando me hacía parar y colocar los pedales en vertical o en horizontal y colocaba unas pegatinas en las caderas y en las rodillas. Con una especie de compás gigante (no sé exactamente qué era) parecía medir el ángulo que formaba la articulación de la rodilla y en función de ese ángulo trabajaba el sillín, más o menos adelantado, más elevado o más bajo. Con un plomo que dejó caer desde la rodilla hasta el eje del pedal tomó otros datos que también sirvieron para hacer pequeñas correcciones de postura. Tras el trabajo con el sillín pasamos a la adaptación del manillar. Para empezar, tuve que cambiar la potencia, pues la que había era demasiado larga y me hacía ir muy estirado hacia adelante. Y así varios detalles más, corrigiendo, modificando, probando... por un espacio de tres horas. Al final conseguimos una buena posición, será cuestión de ponerla en práctica para ver si soy capaz de llevarla durante las horas que dure una competición, con trabajo espero que sí. Aquí os dejo un par de fotos de la sesión.
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